En el reciente foro «Ecosistema de Ideas: Avances y Retos en Sostenibilidad», organizado por el Terminal Portuario de Guayaquil (TPG), expertos y autoridades subrayaron los beneficios de la economía circular como modelo clave para un desarrollo más sostenible y responsable. El evento, que reunió a líderes en sostenibilidad, académicos y representantes del sector privado, abordó el potencial de este modelo de producción en Ecuador y su papel en la transformación de las prácticas ambientales y económicas.
María Fernanda Rumbea, directora ejecutiva de la Fundación Recicla Latam, recalcó el impacto de la economía circular en el cambio de paradigmas, promoviendo el uso de residuos como materia prima para nuevos productos. «Lo que se pretende es reutilizar estos residuos y convertirlos en materia prima para envases y productos que vuelvan al mercado», explicó Rumbea, subrayando la capacidad de este modelo para reducir el desperdicio y mejorar la sostenibilidad.
Luisenrique Navas, gerente de TPG, detalló que este enfoque es fundamental dentro de los compromisos de sostenibilidad de la terminal portuaria, que busca mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y aprovechar oportunidades en un contexto ambiental cambiante. Tania Guerrero, del Municipio de Guayaquil, también enfatizó la importancia de la colaboración entre autoridades y academia para fortalecer iniciativas sostenibles y de economía circular.
Desde el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE), María Daniela Limongi resaltó la necesidad urgente de que Ecuador avance hacia un modelo de economía circular. «Este desafío implica aprovechar los residuos y transformar la cadena de valor para integrarlos en nuevas líneas de producción y comercio», añadió Limongi.
Los expertos coincidieron en que la sostenibilidad y la economía circular representan mucho más que una tendencia. Invertir en estos modelos impulsa la innovación, crea oportunidades económicas y contribuye a la protección del entorno natural.
Además, se destacó la importancia de implementar estrategias que faciliten el desmontaje y la reutilización de infraestructuras, como sistemas de tuberías externas para un mantenimiento más sencillo, y paneles solares en tejados que minimicen la dependencia de energía externa. Este tipo de innovaciones es esencial para promover prácticas sostenibles que impacten positivamente tanto a nivel local como global.