Bajo el capó de los coches se encuentra uno de los elementos más contaminantes que existen: las baterías de plomo-ácido, las cuales están compuestas por plomo, plástico polipropileno, ácido sulfúrico del electrolito y agua.
Su capacidad para deteriorar la naturaleza es extremadamente alta, sobre todo por dos de sus componentes.
Por un lado, el plomo ha sido el elemento responsable de múltiples episodios de contaminación y envenenamiento a lo largo de la historia. El organismo expulsa la mayor parte del plomo al que está expuesto. Sin embargo, una pequeña cantidad puede permanecer durante años, aumentando poco a poco la cantidad presente en el cuerpo. (bioacumulación).
Por otro lado, el ácido sulfúrico es altamente corrosivo si se deposita en entornos naturales. Cualquier animal o planta que entre en contacto directo con esta sustancia sufrirá quemaduras severas.
Por todo ello, hay una campaña mundial para encontrar alternativas y gestionar este residuo peligroso de manera especializada.
En el caso del Ecuador, cada año se fabrican aproximadamente 1.200 millones de baterías de ácido plomo, por lo que, en 2021 se firma el Acuerdo Ministerial 034 sobre el “Instructivo para la aplicación de la responsabilidad extendida del productor (REP) en la gestión integral de baterías ácido plomo usadas (BAPU) con la finalidad de prevenir la contaminación ambiental y posibilitar la utilización racional de los recursos naturales.
Actualmente, Baterías Ecuador lidera este esfuerzo con su programa «Baterías Ecuador Recicla», quienes es su año de gestión han reciclado 800 mil baterías en un 99%.
El proceso de reciclaje implica la extracción cuidadosa de materiales tóxicos, seguido por la recuperación de componentes como el plomo, que puede ser reutilizado en la fabricación de nuevas baterías con excelente calidad. Este enfoque cerrado y cíclico reduce la presión sobre los recursos naturales y disminuye la huella ambiental asociada con la producción de baterías desde cero.
El proyecto trabaja en colaboración con distribuidores y consumidores para establecer sistemas eficientes de recolección y reciclaje que fomentan la participación activa de todos los actores involucrados. En 2023, el programa logró satisfacer el 50% de la demanda de plomo de los recicladores de baterías de plomo en Ecuador.
Según Michael Huff, representante de Rubix Energy Group,»Todo nuestro proceso productivo fomenta una economía circular». Desde la venta hasta el final del ciclo de vida de las baterías, se busca maximizar la reutilización de materiales, reducir la demanda de recursos y minimizar los desechos tóxicos, preservando los recursos naturales y construyendo un futuro más sostenible.
Conoce más sobre la iniciativa y los múltiples beneficios de ella en nuestra entrevista.