Por primera vez, los científicos han documentado a los lobos etíopes (*Canis simensis*), el cánido salvaje más raro del mundo, alimentándose del néctar de las flores del póquer rojo. Este comportamiento podría convertirlos en los primeros grandes carnívoros reconocidos como polinizadores, un hallazgo publicado en la revista Ecology.
Los investigadores observaron a los lobos visitando hasta 30 flores por viaje, cubriendo sus hocicos de polen y transfiriéndolo de una flor a otra mientras se alimentaban. Además, detectaron aprendizaje social en este comportamiento, ya que los lobos jóvenes acompañaban a los adultos a los campos de flores.
Aunque la polinización se asocia principalmente con insectos como las abejas, también participan algunos mamíferos, especialmente pequeños o medianos. Hasta ahora, solo cuatro especies de mamíferos carnívoros habían sido reconocidas como polinizadores, y este descubrimiento añade una especie más al reducido grupo.
Endémico de las alturas de Etiopía, el lobo etíope es el carnívoro más amenazado de África, con menos de 500 individuos distribuidos en seis manadas. Este ecosistema, conocido como el «Techo de África», es igualmente vulnerable, enfrentando la pérdida y fragmentación de su hábitat debido a actividades humanas.
“Estos resultados destacan lo mucho que queda por aprender sobre uno de los carnívoros más amenazados del mundo”, señaló Sandra Lai, del Programa de Conservación del Lobo Etíope y autora principal del estudio. Además, subrayó la complejidad de las interacciones en este ecosistema único y biodiverso, cuya conservación es urgente.