Las jirafas, conocidas como el animal más alto del mundo, enfrentan un alarmante declive en sus poblaciones debido a la pérdida de hábitat, caza furtiva, urbanización y sequías intensificadas por el cambio climático. Ante esta situación, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos ha propuesto incluir a varias especies de jirafas en la **Ley de Especies en Peligro de Extinción**, marcando un paso histórico en su protección.
De aprobarse, las jirafas recibirían protecciones federales bajo dos categorías:
– En peligro de extinción: Para especies como las jirafas de África occidental, de Kordofán y de Nubia, que han sufrido una disminución del 77% desde 1985.
– Amenazadas: Para subespecies como la jirafa reticulada y la masái, que también enfrentan riesgos significativos.
Estas medidas limitarían la importación de partes de jirafas como trofeos y proporcionarían financiamiento para investigación y conservación.
El impacto del cambio climático y la sequía ha reducido las fuentes de alimento y agua para las jirafas, exacerbando su vulnerabilidad. Simultáneamente, el comercio y la caza de jirafas han convertido a Estados Unidos en un importante mercado, con casi 40.000 ejemplares importados en una década para trofeos y productos derivados.
La propuesta estará abierta a comentarios públicos hasta el 19 de febrero de 2025, con la intención de finalizarla dentro de un año. Según Martha Williams, directora del Servicio de Pesca y Vida Silvestre: “Estas protecciones no solo ayudarán a las jirafas, sino que también impulsarán la biodiversidad y la sostenibilidad económica”.
La medida representa una esperanza para estas majestuosas criaturas, cuyos largos cuellos y distintiva presencia simbolizan un equilibrio frágil en los ecosistemas de África. Ahora, su futuro depende de acciones coordinadas entre la conservación internacional y las nuevas políticas locales.