El municipio de Zapotillo se erige como un bastión de oportunidades en el ámbito turístico, nutriendo sus enclaves con el proyecto “La Magia del Bosque Seco”, una iniciativa impulsada por su Gobierno Municipal para potenciar cada rincón con esplendor natural. En la luminosa mañana del viernes 5 de abril de 2024, se dio inicio a la travesía turística hacia la majestuosa cascada El Coronel.
Esta caída de agua no solo representa un encuentro con la naturaleza en su estado más puro, sino que también constituye una ventana abierta hacia la conciencia ambiental y la conservación del valioso ecosistema que la rodea. Jorge Panamito, líder del GAD Parroquial de Garzareal, resalta que este proyecto no solo busca resaltar la belleza natural, sino también impulsar la interacción con las comunidades locales, enriqueciendo así la experiencia del visitante a través del turismo comunitario y el intercambio cultural.
El renombrado ecólogo Bruno Paladines, quien dirige Naturaleza y Cultura Internacional Ecuador (Funace), subraya la importancia de El Coronel como uno de los tesoros naturales de la provincia de Loja, resaltando además la preservación del patrimonio cultural y arquitectónico de las comunidades circundantes, lo cual añade un valor inestimable a la propuesta turística. Según él, la pérdida de este patrimonio implicaría una merma fundamental para el desarrollo del turismo en la región.
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El alcalde Burner Moncayo, por su parte, destaca cinco razones que convierten a Zapotillo en un destino turístico destacado en la provincia de Loja: su exuberante bosque seco, las impresionantes cascadas del Coronel y del Lobo, el místico Baño del Inca, su exquisita gastronomía, la hospitalidad de su gente y la accesibilidad a través de vías que conectan con otros cantones vecinos e incluso con el país vecino, Perú.
Para acceder a la cascada El Coronel, los turistas podrán optar por caminatas o paseos en bicicleta, lo que les permitirá disfrutar de vistas panorámicas y paisajes pintorescos durante todo el recorrido. Es así como este tesoro natural, perteneciente a la reserva La Ceiba y ubicado en el barrio Barsareal de la parroquia Garzareal, se convierte en un destino imperdible para los amantes de la naturaleza y la aventura.
